Introducción a qué es la autoobservación
Hola amigos, ¿Cómo están? En este articulo exploraremos el significado de la autoobservación, una habilidad esencial en el camino espiritual. Podrás conocer algunos ejercicios prácticos, desde observar comportamientos hasta descubrir la energía detrás de los pensamientos, aprenderemos a iluminar las áreas oscuras de nuestra mente y alma con la luz de la conciencia.
En este vídeo, vamos a hablar de qué significa autoobservación. La autoobservación va muy de la mano con la capacidad de autoconciencia. Tú puedes observarte en un espejo, por ejemplo, y si te estás observando a ti mismo, eso es autoobservación. Autoobservación es observarse a sí mismo, pero en este ejemplo de si tú te observas en un espejo, claro, eso es una autoobservación extremadamente superficial que está siendo gracias a tus ojos.
Pero en el contexto espiritual hablamos de autoobservación cuando observamos hacia dentro de nosotros, o sea, que aquí no tiene nada que ver el cuerpo y cuando se hace una autoobservación interna, no se utilizan los ojos, se utiliza una capacidad que tiene la mente, a la que yo le llamo autoconciencia. Esa es la capacidad que se utiliza. (Puedes ver el vídeo de la autoconciencia aquí) Sin autoconciencia no seríamos capaces de autoobservarnos. Y esto cuando se usa la autoobservación para el camino espiritual, que por cierto es extremadamente importante e incluso yo diría esencial que sin autoobservación no puedes avanzar en el camino espiritual porque toda la oscuridad mental y espiritual que cada cual tiene debe ser vista, observada por nosotros mismos para que la saquemos de nosotros, pues solo así la podemos iluminar. Por eso digo que no puedes avanzar en el camino espiritual sin autoobservarte. Necesitas hacerlo, debes hacerlo, tienes que hacerlo. Es demasiado importante, muy importante, es esencial.
Cuando se empieza en esto, lo que primero que se hace es generalmente observar nuestros comportamientos. Voy a dar una serie de ejemplos solo para que las conozcan, para que tengan una idea de cómo hacerlo porque si bien el concepto es extremadamente simple, para avanzar en la habilidad de autoobservación necesitas practicar, practicar, practicar, practicar y practicar.
Y humildemente puedo decir que tengo algún grado de habilidad que es no tan inicial. La parte más inicial en el ejercicio de la autoobservación comienza con observar nuestros comportamientos. Un ejemplo, una práctica de ello es, simplemente vivir tu vida, hacer tus cosas del día a día, pero si de pronto sucede algún conflicto con alguien o con alguien particularmente. o hay una discrepancia de algo, el ejercicio es este. Una vez que puedas estar tranquilo y solo, no con alguien que te esté hablando, tú puedes tal vez cerrar los ojos y recordar el momento y con toda la objetividad posible que tú puedas, debes recordar literalmente lo que tú dijiste, lo que esa persona dijo por separado y luego, intentar visualizar y ver el contexto, intentar recordar, ser consciente de los gestos que hiciste, el rostro que pusiste, el rostro que puso la otra persona, los gestos que hizo, etc.
Si tú practicas lo suficientemente esto vas a desarrollarte en tu habilidad, en tu técnica de autoobservación. La autoobservación para mí es una técnica de autoconocimiento que practico demasiado y mucho, pero un ejemplo y una manera práctica de usar la autoobservación es haciendo lo que te acabo de decir. Luego eso te permitirá primero darte cuenta de cosas que hizo la persona, darte cuenta de cosas que hiciste tú y después puedes evaluar con honestidad todo lo ocurrido, puedes evaluar tu propio comportamiento y decir tal vez cuando hice esto no debí haberlo hecho, o hay una palabra que no era la que debí haber usado, etcétera y luego, para seguir al siguiente nivel de autoobservación, entran los pensamientos.
Porque todo comportamiento surge de nuestros pensamientos, así que si obviamente tú dijiste una palabra concreta que después evalúas que quizá no fue la mejor, tienes que profundizar más y decir bueno, entonces, por qué dije esa palabra, qué es lo que pienso y qué pienso respecto a este tema, a esa persona, a esta situación, etcétera, todo es autoobservación, cuando vas hacia eso vas entonces a avanzar al siguiente nivel en la autoobservación porque ya no vas a estar observando solamente tus comportamientos, vas a estar observando también tus pensamientos.
En la práctica que te acabo de recomendar puedes autodescubrir cosas súper importantes, súper interesantes que antes no te habías ni siquiera enterado que estaban contigo. Entonces, ese es el siguiente paso, observar nuestros pensamientos. Puedes hacerlo haciendo el ejercicio, puedes usar la práctica que te estoy dando como ejemplo o también puedes meditar. Cuando vas a meditar, la meditación va a tener un foco de meditación en el que tú te vas a concentrar, pero eventualmente va a venir un pensamiento a distraerte de lo que sea, de cualquier cosa. Todos esos pensamientos tú los vas a observar, y luego, de nuevo, puedes cuestionarte e intentar ir más allá y preguntarte por qué vienen estos pensamientos, por qué tengo esos pensamientos, ahí estás observando tus pensamientos y al hacer eso estás autoobservando tu mente.
Ya quieres profundizar más, todavía se puede más, el siguiente paso es aprender a descubrir cuál es la energía detrás de los pensamientos. Ese es el siguiente nivel al que he llegado no hace mucho, hace tal vez tres años, pero hay que aprender a descubrir qué energía hay detrás de los pensamientos. Cada pensamiento que surge en nuestra mente tiene una energía detrás que es su sustento, sin esa energía los pensamientos no pueden surgir.
Hemos pensado muchas veces que yo pienso algo y entonces siento. Yo realmente pensaba que era así, y yo sé que mucha gente ha pensado así, y debo decirte que es al revés, que lo que primero sucede es que sentimos y luego pensamos, pues hay una energía que se siente y sobre esa energía se crea un pensamiento, encima de esa energía, ¿me entiendes? y si tú eliminas esto, el pensamiento muere porque no tiene sustento, no tiene cómo hacerse presente.
Entonces, el siguiente paso en la observación es descubrir esa energía. Lamentablemente esto no te lo puedo enseñar en un vídeo así porque requiere también harta práctica, pero eso es otro nivel de autoobservación en el que tú puedes profundizar y puedes intentar ver y descubrir qué es lo que hay detrás de cada pensamiento. Esto te da un super poder super interesante porque logras descubrir a qué, qué es lo que estás sintiendo realmente, más allá de los pensamientos, y eso también es autoobservación.
Ok, el siguiente paso ya, el último paso al que he llegado es observar constantemente qué es lo que sientes, más allá de cómo está mi cuerpo, cómo me comporto, qué pienso, es cómo y qué siento, qué siento, qué estoy sintiendo… Y cuando agudizas mucho la observación de esto logras descubrir pequeñas sutilezas de cosas que vas sintiendo en diferentes ocasiones, diferentes momentos del día y luego puedes usar eso para descubrirte aún más.
Nos vemos en una próxima.
Un abrazo!